La palabra fotografía es de origen griego, viene de “photos” que significa LUZ y “graphis” que significa dibujo, escritura.
Por tanto la forma más poética y la más común con la que podemos denominar a la palabra fotografía sería la de “pintar con luz”.

Si nos encerramos en una habitación a oscuras evidentemente no vemos nada y si encendemos la luz vemos los diferentes objetos, lógico.
¿A qué nos lleva esto? Pues a poder decir que somos la LUZ que reflejamos, lo que nos da la opción de poder actuar sobre la cantidad, tamaño, color, refracción y/o reflexión de la misma y por tanto alterar la percepción que los demás puedan tener sobre nosotros.

Ahora podremos decir que las cosas “no se ven según el cristal con el que se miran si no que se  ven según la LUZ con la que se iluminan”.
Muy importarte, por tanto, es saber cuáles son las propiedades de la LUZ para poder manipularla y así poder “pintar” lo que nosotros queramos.

Para conocer mejor las propiedades básicas de la LUZ.

Puerto Marina asomada al mar